martes, 29 de marzo de 2011

Agradecer....

Esta semana me puse a escuchar música de mis tiempos de Bloggera (llámese de bloggera full time).

Es decir la música que escuchaba en 2005. Me trajo muchísimos recuerdos, algunos lindos, otros no tanto.

Me puse a hacer un análisis (sí, la música causa esos efectos en mi). Y me di cuenta que las mujeres somos tan tontas....esperando la historia de amor perfecta, el hombre ideal y todas esas patrañas mientras se pasa la vida.

No he tenido ningún desengaño amoroso desde aquella época. Es más, me casé, soy feliz y tengo un super buen marido quien me espera en la casa con la comida cuando llego tarde, quien me entiende y por sobretodo ME TIENE PACIENCIA.

Claro, no es perfecto y a eso quiero llegar...el NO es perfecto ni nunca lo va a ser. Tampoco voy a ponerme a listar sus defectos acá porque si llega a leer esto me mata, pero quiero decir que no es ni por cerca la definición del principe azul.

Nos conocimos, vivimos juntos, tuvimos problemas, los solucionamos y nos casamos...es asi como son las historias de amor ¿no? "Y vivieron felices para siempre..."

Pero es ahi cuando deberían empezar las historias de amor, los cuentos infantiles. Ahi es cuando empieza la historia.

Tratar de congeniar con la familia política, ponerse de acuerdo en cuando tener hijos, lidiar con las ofertas de trabajo en el extranjero, enfermedades, pena, rabia, peleas, reconciliación, amor, celebraciones...

Tantas cosas son las que pasan y eso es el amor verdadero señores. No ese de novela y de comerciales. El amor verdadero se construye día a día, es dificil, sube y baja pero está ahi.

Solo tienes que recordarlo...y agradecer las cosas buenas de la vida.

lunes, 28 de marzo de 2011

Oscuridad...

A veces quieres volver oscuridad. Quieres recordarme esos tiempos feos y difíciles.

¿Por qué? No entiendo qué quieres de mi. Yo tengo todo, no necesito nada...pero la oscuridad quiere volver.

Me indica que me falta...que algo falta. Que algo se pierde. No la entiendo.

Oscuridad, por favor alejate. No te necesito acá. No me recuerdes el tiempo antiguo.

Déjame en paz.